Gnocchis de papa

Cocer las papas con piel hasta que al pincharlas estén blandas. Dejar entibiar un poco, retirar la piel y prensar o moler como puré. Dejar que se enfríe un poco más y luego agregar el huevo, mezclar con cuchara de palo hasta que esté uniforme y agregar la harina con la sal. Es importante no sobre mezclar, amasar, ni batir, sino quedará muy chiclosa la masa por el almidón de la papa. Cuando ya la masa se despegue de la cuchara, usamos las manos para terminar de mezclar hasta que esté homogénea y se despegue fácilmente (puedes usar más harina si lo necesitas).

En un mesón enharinado divide la masa en dos (porque se va a alargar harto) forma un cilindro y corta en trozos pequeños del grosor de tu pulgar aprox. Hazlos bolita y recuerda enharinar para que no se peguen. Para darles la forma característica puedes usar una tabla para gnocchi o un tenedor, en este caso presionas un poco la bolita con el pulgar, la mueves de lado a lado y luego la haces girar sobre sí misma.

La cocción es rápida, en una olla necesitas hervir agua y sal (nada de aceite) y los vas sacando a medida que flotan. Si los quieres con salsa, en una olla o sartén aparte, ten lista la salsa ya caliente y los agregas ahí para que se impregnen. Si los quieres solitos, échales un poco de aceite de oliva para que no peguen. ¡Y listo! En este caso los cociné con una salsa tipo toscana (salsa de tomate, aceitunas, cebolla, zanahoria y orégano fresco). ¡Hazlos con la salsa que quieras y disfrútalos con un buen vino!